Pecamos de modestia exagerada y de egoísmo genético. No sabemos trabajar en equipo, no podemos reconocer los logros de los demás, no entendemos lo que es respetar y aceptar el triunfo ajeno (ni el propio), no tenemos disciplina, objetivos ni conceptos de excelencia ni compromiso en lo que hacemos.
El punto aquí es que podrán contratar a “Juan de la Chingada” para dirigir a la aberrante selección nacional de fucho, pero desgraciadamente el defecto no es del “alfarero” sino del barro que está utilizando. En una ocasión un buen amigo Argentino me dijo (claro, con mi total encabronamiento implícito): “Jamás podrás hacer una vasija con mierda”. Aún tengo la esperanza de que si le mezclamos un poquito de lodo igual y sí.
Nunca lograremos destacar en fútbol si no cambia la actitud de los involucrados… o hasta que venga Kuwait y nos meta 5 goles en el azteca y la pinche federación decida hacer una selección nacional de diez naturalizados y un portero hijo de franceses nacido en un avión de Mexicana.
Al final la culpa fue del “Alfarero” una vez más. "Que se vaya ese pobre diablo que no sirva para nada… aquí en México tenemos muchas personas que podrían hacer el trabajo mejor que él" ¿será? Creo que sí… somos un pueblo extremadamente bueno para TODO!!! Dejemos de chingaderas y pongámonos a trabajar.
P.d. nunca he sido muy clavado con el fut!!
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